En una escuela de Las Playitas, en La Unión, se aprecian grietas en los pilares, tras el fuerte sismo. / Rosa Fuentes


Un sismo de 5.9 grados Richter se registró ayer en el país, despertó temor en la población y generó daños menores en la zona oriental. Según el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), el epicentro fue al sur de playa Las Tunas y el movimiento se sintió en todo El Salvador, así como en Honduras y Nicaragua.

El temblor se registró a las 10:22 de la mañana y aunque no generó alarma de tsunami sí despertó el temor de muchas personas que salieron asustadas de sus sitios de trabajo.

De hecho, trabajadores de todos los ministerios -ubicados en el Centro de Gobierno- y la Asamblea Legislativa, así como estudiantes en algunas universidades y centros escolares fueron evacuados.

Douglas Hernández, coordinador de monitoreo geológico del MARN, afirmó que el sismo se registró a una profundidad de 36 kilómetros al sur de playa Las Tunas, en el departamento de La Unión, con una intensidad de 3 en San Salvador y 4 en San Miguel en escala de Mercalli modificada.

Posterior al sismo, se registraron otros movimientos telúricos de menor magnitud que, según Hernández, son normales y se generan “como parte del reacomodo de la zona” tras un temblor de esa magnitud.

La Dirección General de Protección Civil informó que en la zona El Capulín, en el departamento de San Miguel, se registraron pequeños derrumbes, mientras que el alcalde de La Unión, Ezequiel Milla, afirmó que en los cantones Tigüilotal, El Higuerón y El Coyolito se reportaron daños en techos y paredes de 15 viviendas. Además, en el Centro Escolar Caserío Playitas, en el cantón Agua Escondida, se agrietaron los postes y la parte trasera de las paredes.

El viceministro de Educación, Francisco Castaneda, indicó que seguirán de cerca el informe técnico y científico de Protección Civil y que no se suspenderán clases en el centro escolar dañado.