El acuerdo que El Salvador negocia con el Fondo Monetario Internacional (FMI) puede incluir mecanismos para mejorar las condiciones de la deuda local, no solo para bajar la exposición a la de corto plazo sino de aquellas emisiones de bonos y préstamos con tasas altas.


Óscar Avalle, representante del Banco Mundial (BM) para El Salvador y Costa Rica, cree que al amparo del acuerdo el país tiene la posibilidad de mejorar el perfil crediticio en el largo plazo.


La deuda del Sector Público No Financiero (SPNF) de El Salvador cerró el 2020 sobre el 85 % del Producto Interno Bruto (PIB), pero hay otros riesgos en puerta como la obligación de pagos en instrumentos de corto plazo, como las Letras del Tesoro (Letes), que suman más de $2,000 millones en vencimientos en 2021.


Avalle dijo ayer en República, de Canal 33, que en el eventual acuerdo con el FMI no se puede descuidar el gasto de emergencia por el covid-19, pero también aseguró que es “importante” identificar un paquete de financiamiento para reestructurar los compromisos con los acreedores.


Una movida de este tipo le permitiría a la administración de Nayib Bukele reducir la brecha fiscal, particularmente por bajar el pago de intereses de aquellos compromisos adquiridos con tasas en el rango entre el 7 % y el 9 %, tras convertirlos a un cupón del 1 % con otras fuentes.


Solo en marzo de 2021 Hacienda debe honrar $328 millones de Letes y en septiembre debe pagar $625 millones de Certificados del Tesoro (Cetes), compromisos que se complican ante una economía en recuperación y un ritmo de recaudación que sigue operando por debajo de las previsiones hechas en el presupuesto de 2021.




Somos los primeros en decir ‘hay que hablar de un plan de manejo de la deuda de corto plazo’, ninguno de los gobiernos anteriores se quiso comprometer”, Alejandro Zelaya, Ministro de Hacienda



El ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya, confirmó la semana pasada en una rueda de prensa que también negocia con los bancos Centroamericano para la Integración Económica, Mundial e Interamericano para el Desarrollo para el desembolso de nuevos montos a tasas preferenciales.


Andrés Oliva, economista de la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (Fusades), es de la idea de hacer una reforma para incluir en el presupuesto el pago de las Letes.




Otro tema importante en esto es cómo utilizo la deuda para recomprar deuda más cara. Si yo tengo deuda de más corto plazo a 9 %, 8 % o 7 % y puedo reemplazarla con e 1 % de un organismo internacional: bienvenido sea”, Óscar Avalle, Representante del Banco Mundial en El Salvador



El especialista identifica oportunidad en la Ley Orgánica de Administración Financiera del Estado (Ley AFI) en la que se puede incluir un artículo para transparentar de dónde se pagarían las Letes que se emitan.











Moody’s y Fitch han alertado sobre riesgos en materia fiscal, aunque matizan que la nueva correlación en el Legislativo da ventajas al Gobierno de Bukele.



Oliva dijo que este ajuste se hace “en el sentido de que se hace la reestructuración y se baja el saldo, pero, bueno, sería un funcionamiento después de pagarlas porque si no se hacen estas cosas va a volver a subir”.



Oportunidad


Avalle recalca que los acuerdos con el FMI se logran tras las negociaciones con los gobiernos. “Lo que hace el fondo es discutir la viabilidad de lo que presenta el Gobierno, no es que haya una imposición de un programa sobre un gobierno”, reiteró.


El cómo, continuó, es una decisión del Gobierno y el Gobierno es que le está planteando opciones de cómo se puede lograr ese ajuste.


Fitch adviertió en su último informe que el Gobierno aún no presenta una estrategia fiscal a mediano plazo y los planes para ordenar las finanzas públicas; mientras que en el de Moody’s, la entidad alertó sobre otros vencimientos que se avecinan, pero que tendrán en fondearse pronto.