El jefe de la fracción del grupo parlamentario de Arena, Carlos Reyes, reiteró hoy la condición de transparencia para dar los votos a la incorporación de $389 millones del Fondo Monetario Internacional (FMI) en el presupuesto de emergencia por el COVID-19.

Estos $389 millones son parte de la autorización de $2,000 millones que el Órgano Legislativo aprobó al Órgano Ejecutivo del Estado.

Reyes aseguró que el ministro de Obras Públicas, Romeo Herrera, dijo que ha gastado más de $14 millones y “ha mandado una paginita aquí” para rendir cuentas sobre los gastos.

Agregó que el ministro de Salud, Francisco Alabí, les informó que ha comprado mascarillas y botas de hule, “pero no dice cuánto le ha costado cada mascarilla”.

El diputado sostuvo que el ministro de Defensa, René Merino Monroy, aseguró que ha comprado combustible “pero no dice cuántos galones ni a qué precio”.

“Estos son fondos de todos los salvadoreños. Les pedimos transparencia. El secretario jurídico, el que dice que trabaja ad honorem, resulta que le mandamos a consultar, nos manda a decir que tomamos el listado de los del subsidio pero no nos dice cuántos son”, se quejó.

Así, el legislador del partido de derecho aseguró esta mañana que, “mientras no se resuelva el tema de la transparencia, será muy difícil” aprobar los $389 millones. “Entonces, que no nos eche la culpa”, exclamó.

Por su parte, la diputada Margarita Escobar, quien representa a dicho partido político en la Comisión de Hacienda, sostuvo que el Gobierno les debe presentar una alternativa de control del gasto de los $2,000 millones, ya que 5 de los 11 miembros del Comité del Fondo de Emergencia renunciaron.

El presidente de la República, Nayib Bukele, aseguró ayer que la institución que controla los fondos es la Corte de Cuentas de la República.

El ministro de Hacienda, Nelson Fuentes, ha dicho que el Gobierno ha tenido que recurrir a financiamiento externo por la caída de sus ingresos, que se reducirán $800 millones. Ayer, el Gobierno anunció que incrementará la distribución de paquetes alimenticios de 1.7 millones a 3.4 millones.

El 14 de abril, el Directorio Ejecutivo del FMI aprobó la solicitud de asistencia financiera como Instrumento de Financiamiento Rápido (IFR) para ayudar al país a enfrentar "la urgente necesidad de balanza de pagos derivada de la pandemia del coronavirus" y dirigir fondos rápidamente más afectados, es el primer desembolso en más de tres décadas de un acuerdo de préstamo con el FMI.

El FMI anunció que continúa monitoreando la situación de El Salvador y que es necesaria ampliar temporalmente el déficit fiscal para preservar la salud público y contener el impacto económico de la pandemia, permitir medidas temporales que concluyan en 2021 una vez haya concluido la pandemia y comprometerse a un ajuste fiscal gradual a partir de 2021, hacia un 3.5 % del PIB para finales de 2024 y una deuda hasta del 60 % del PIB en 2030, asegurando el cumplimiento de la Ley de Responsabilidad Fiscal.