Dos niños fueron amputados por manipular pólvora durante el Plan Belén. / DEM


El subdirector del Hospital de Niños Benjamín Bloom, Héctor Guillermo Lara, afirmó ayer que desde el 1 de noviembre de 2018 hasta el 10 de enero de 2019, el centro hospitalario ha atendido a 33 niños quemados por pólvora.

“Anoche hubo el último, que encontró un cohetillo, le sacó la pólvora, lo encendió y se quemó el ojo”, dijo.

El subdirector indicó que el último infante lesionado por pólvora tiene cinco años de edad y se presentó con una quemadura en la córnea. En total, hasta el 10 de enero, el Hospital Bloom ha atendido a 33 menores de distintas zonas del país, que han presentado lesiones de diferentes grados y en diversas partes del cuerpo.

De acuerdo con Protección Civil, las partes del cuerpo más afectadas son los miembros superiores, las manos, los dedos, la cabeza y los ojos.

Durante el Plan Belén, que tuvo lugar entre el 24 de diciembre de 2018 y el 2 de enero pasado, las autoridades del Sistema Nacional de Protección Civil reportaron 118 niños quemados a nivel nacional.