El Ministerio de Relaciones Exteriores comunicó que gestiona la repatriación de dos adultos y una niña, salvadoreños, quienes fallecieron en los últimos días en su intento de llegar a Estados Unidos de manera ilegal.
“El ministerio, a través de la red consular y la Dirección de Derechos Humanos, ha brindado asistencia consular y apoyo a los parientes de las víctimas”, indican sobre el caso de Óscar Alberto Martínez y de su hija Angie Valeria, quienes murieron ahogados tras ser arrastrados por el río Bravo, en el norteño estado mexicano de Tamaulipas fronterizo con Estados Unidos.
En este caso, la Presidencia de El Salvador anunció que correrán con los costos que implique traer a El Salvador a los familiares.
De acuerdo con Alexandra Hill, canciller salvadoreña, aceleran el proceso que generalmente se tardan unos cinco a seis días, “pero esperamos hacerlo antes y por esto estamos trabajando 24/7”, dijo.
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El salvadoreño y su hija murieron ahogados cuando buscaban ingresar a EE.UU. a través de un tramo del estado mexicano de Tamaulipas. Se sumergieron en el río para ingresar a Brownsville, pero murieron en el intento. La tragedia sucedió la tarde del domingo.
Tania N., esposa y madre de los fallecidos, pidió el apoyo de las autoridades de Matamoros, tras ver cómo los cuerpos de sus familiares fueron arrastrados por el río. Ella logró salvar su vida, luego de ser rescatada por un familiar que la acompañaba.
En un mismo comunicado, la Cancillería informa que ha pedido investigación en torno a la muerte de otra salvadoreña en el Estado de Veracruz, México. Del cuerpo de la compatriota “ya empezaron las labores de repatriación”.
La joven salvadoreña de 19 años murió después que, al parecer, agentes de seguridad dispararan contra el autobús en el que viajaba. El hecho sucedió el pasado 14 de junio en dicho estado mexicano.
