Según la alcaldía siguen los parámetros de Medicina Legal para excavar. / AFP


Sepultureros comenzaron a perforar tumbas en el cementerio La Bermeja de San Salvador para eventuales muertos que provoque el nuevo coronavirus en el país, constató ayer un periodista de la AFP.

La iniciativa de tener disponibles 118 fosas en el cementerio municipal monseñor Óscar Arnulfo Romero es en “previsión ante una desafortunada pérdida”, en el marco de la emergencia nacional por la pandemia, consignó por medio de un comunicado la Alcaldía de San Salvador.

El Salvador lleva registrados tres casos del nuevo coronavirus, hasta ayer ninguno fatal.

Los sepultureros, que contarán con el apoyo de efectivos del Ejército, tienen la orden de cavar las tumbas a una profundidad de dos metros.

“El alcalde Ernesto Muyshondt seguirá el protocolo dado por (el Instituto de) Medicina Legal, en el tratamiento del cuerpo para su inhumación”, destacó la municipalidad.

En ese sentido, para los fallecidos por COVID-19 “no habrá velación”, serán llevados “directamente a la inhumación”, y solo se permitirá la presencia de cinco acompañantes de la familia.