La zona de convergencia intertropical está mezclada. / Cortesía


Autoridades de socorro en Centroamérica se declararon ayer en alerta ante las lluvias intensas que azotan las áreas costeras por la presencia de dos sistemas de baja presión que amenazan con provocar inundaciones y deslaves.

Los sistemas climáticos localizados sobre el Caribe y el Pacífico desataron intensas lluvias en Nicaragua, “con la consecuente saturación de los suelos”, por lo que el Sistema Nacional de Mitigación y Atención de Desastres (Sinapred) declaró alerta preventiva en ese país.

El organismo alertó que la persistencia de las precipitaciones implica el “riesgo de inundaciones en las áreas bajas y deslaves en zonas montañosas”.

En tanto, Guatemala se mantiene bajo alerta de precaución desde mayo, cuando comenzó la temporada lluviosa, y este lunes la protección civil emitió dos avisos preventivos a la población ante la presencia de los sistemas de baja presión.

Los avisos pretenden que se eleve el monitoreo de “áreas con amenaza a derrumbes y deslizamientos, así como el seguimiento a los diferentes ríos y quebradas que presentan incremento en sus caudales y que podrían desbordarse y afectar comunidades aledañas”, dijo Walter Monroy, subsecretario de protección civil de Guatemala.

El Salvador declaró alerta amarilla ayer en todo el país y naranja en el Bajo Lempa y cuatro municipios orientales. Además de alerta roja en la colonia Santa Lucía, de Ilopango, al oriente de San Salvador.

Igualmente, Costa Rica declaró alerta amarilla, de precaución, en la provincia noroccidental de Guanacaste, la más golpeada por los aguaceros, que el fin de semana vivió inundaciones y deslizamientos en algunas zonas, según la Comisión Nacional de Emergencias.

Varias familias debieron ser trasladadas a una escuela convertida en albergue en esa zona costarricense por la inundación en su comunidad, informó la comisión.

En cuanto a Honduras, declaró alerta amarilla en Valle y Choluteca, mientras que alerta verde en 16 departamentos del país.