La agencia Fitch Ratings anunció este martes que mantiene la calificación crediticia de El Salvador en 'CCC+', una nota que se encuentra limitada por la elevada deuda pública y el “historia reciente” de incumplimientos relacionados con los compromisos de pensiones.

Fitch asignó en mayo de 2023 la nota en 'CCC+', un grupo para las economías o empresas con riesgo crediticio sustancial y una posibilidad real de incumplimiento. Para los soberanos con notas en 'CCC' o inferiores, la agencia no otorga perspectiva.

La agencia explicó que la calificación se respalda por un mayor desarrollo humano en comparación con los países de la región y una historia de relativa estabilidad macroeconómica gracias a la dolarización.

Sin embargo, la calificación está condicionada por la elevada deuda pública, una “historia reciente de incumplimiento de la deuda local relacionada con las pensiones", un déficit fiscal persistente y una capacidad de financiamiento limitada. Influye, además, añadió la agencia, la disminución en los indicadores de gobernanza.


Perspectivas

Citando los datos oficiales, Fitch recordó que la economía salvadoreña creció un 3.5 % en 2023 por un fuerte desempeño de la industria de la construcción en un 17.9 % y la reactivación de los servicios recreativos en un 10.9 %.

Para 2024 y 2025, Fitch anticipa un crecimiento de un 3 %, mejor escenario en comparación con el promedio histórico de un 2 % entre 2001 y 2019.

“Los esfuerzos del gobierno para mejorar la seguridad luego de su represión integral contra la violencia de las pandillas han ayudado a respaldar una actividad económica sólida y podrían ser una ventaja potencial para el débil crecimiento potencial del país”.

Fitch Ratings
Informe 29 de abril de 2024


De igual manera, la agencia calcula que el déficit fiscal -brecha entre ingresos y gastos- pasó de un 2.6 % en 2022 a un 4.7 % en 2023, incluyendo las obligaciones de pensiones. El aumento en el déficit se explica, según Fitch, por mayor inversión pública y gasto acumulado de los fondos de pensiones desde la reforma de 2017.

La agencia prevé una disminución del déficit fiscal a un 3.9 % en 2024 y un 3.4 % en 2025.

La deuda del sector público no financiero alcanzó en 2023 un 84.9 % del Producto Interno Bruto (PIB), una tasa superior al 77.1 % de 2022.

“Fitch anticipa que la deuda pública respecto del PIB se estabilizará en los próximos años en alrededor del 85 % del PIB. Sin embargo, los altos costos de endeudamiento han resultado en un diferencial adverso entre tasa de interés y crecimiento que podría mantener la deuda en una trayectoria ascendente en ausencia de una mayor consolidación”.

Fitch Ratings
Informe 29 de abril de 2024


Brecha de financiamiento

Fitch estima que el gobierno enfrentará una brecha de financiamiento de un 13.4 % del PIB para 2024, incluyendo la deuda a corto plazo que asciende a un 6.5 % del PIB. Los préstamos del BCIE y el CAF continúan financiando los proyectos de infraestructura, compensando que El Salvador aún tiene un perfil de elevado riesgo en el mercado de bonos.

“El apetito y la capacidad de los inversores nacionales, incluidos los fondos de pensiones y los bancos, para absorber la deuda pública han disminuido en los últimos años. Sin embargo, Fitch anticipa que el gobierno podrá continuar financiando su presupuesto en el corto plazo a través del mercado local”, sostuvo.

La agencia recordó que el gobierno mantiene con la banca privada un programa de reperfilamiento de la deuda de corto plazo, que alivia las presiones de pago.

Para la agencia, un programa con el Fondo Monetario Internacional (FMI) incluiría un ajuste fiscal de entre un 3 % y un 4 % del PIB para garantizar la sostenibilidad de la deuda, siempre que hay un acuerdo sobre el bitcoin que generó discrepancias entre el Fondo y el gobierno salvadoreño.