Los tributos representan la principal fuente de financiamiento del aparato estatal, que dependen en gran medida del desempeño de la economía salvadoreña. Según Hacienda, a abril pasado sumaron más de $2,886.7 millones.
Dicha cifra también es un 5.6 % superior a las proyecciones presupuestarias, con $152.4 millones adicionales a lo que Hacienda tenía previsto recaudar en tributos y contribuciones de acuerdo con el presupuesto general de la nación.
En total, los ingresos corrientes y contribuciones sumaron $2,989 millones a abril, $395.5 millones (15.3 %) superiores a los resultados del mismo período de 2023, o $98.9 millones (3.4 %) frente al presupuesto. Esta suma incluye las entradas al fisco de los tributos, las contribuciones y los no tributarios (tasas y derechos).
Un vistazo a los ingresos
La carga tributaria de El Salvador está estructurada en 18 grupos, donde los impuestos sobre la Renta (ISR) y al Valor Agregado (IVA) son los principales generadores de ingresos al fisco salvadoreño, con un 91.3 % a abril.Del ISR se recaudaron $1,461.5 millones, al menos $236.5 millones adicionales frente a 2023, un 19.3 % de crecimiento. En comparación con el presupuesto, el dinamismo es más tenue, de $37 millones (2.6 %).
La renta se cobra con un año de retraso a los ingresos de las personas y las empresas. El pasado 30 de abril cerró el período para que los contribuyentes declararan el ISR correspondiente a 2023.
El IVA, en cambio, se carga al consumo. Es decir, que lo paga cada persona al comprar un servicio o producto, desde un churro hasta bienes de mayor dimensión, como vehículos. De enero a abril, el IVA dejó un poco más de $1,176.7 millones, $166.7 millones (16.5 %) adicionales frente al mismo período del año pasado, o $91.1 millones (8.4 %) adicionales con la proyección presupuestaria.
Los contribuyentes también pagan impuestos selectivos al consumo de productos como cigarrillos, cervezas, productos alcohólicos, combustibles y armas. Este grupo de gravámenes representó $78.5 millones entre enero y abril, $1.7 millones adicionales (2.2 %); sin embargo, se quedó lejos de la proyección, en $5.3 millones (-6.3 %).
Los derechos arancelarios a la importación crecieron 11.6 %, al superar $108 millones; los gravámenes diversos experimentaron un repunte de 40.7 % al sumar $37.5 millones.
Sin embargo, las contribuciones especiales cayeron un 60.5 % y cerraron en $13.9 millones.
Los ingresos no tributarios dejaron al fisco $102.4 millones, una cifra que creció en $6 millones (6.2 %) frente a 2023, pero fue $53.5 millones (-34.5 %) menos que la proyección.