Vestidos de negro, Díaz-Canel y su esposa, Lis Cuesta, depositaron rosas rojas y prendieron velas en memoria de las víctimas de la tragedia, que conmocionó al país, tras guardar un minuto de silencio.
Que este minuto de silencio "sea un abrazo de amor a sus familiares y amigos", dijo la televisión estatal, al convidar a todos los cubanos a cumplir esa expresión de luto y condolencias.
Ante placas que mostraban fotografías de los fallecidos, en las que también se podían leer sus nombres y edades, familiares y amigos, algunos ahogados en llanto, depositaron rosas, gladiolos y girasoles. La imágenes de familiares acariciando el rostro de sus seres queridos eran demoledoras.
"El dolor es demasiado", es "un golpe que nunca voy a poder olvidar", declaró a la AFP la exdirectora del Saratoga, Arlién Chang, de 40 años.
La estudiante universitaria Katherine Cairo(22) también acudió para expresar su solidaridad: "las velas, las luces, las flores" representan "vida eterna para todos estas personas que fueron víctimas".
La tristeza y el silencio dominaban la atmósfera en el parque, pese a los miles de personas que se congregaron en el lugar para apoyar a los familiares de los 46 fallecidos en la tragedia, entre ellos cuatro niños y adolescentes y una turistas española de 29 años.
En la vigilia también participaron otros altos dirigentes del país y representantes de los equipos de rescate y de la Cruz Roja local, que trabajaron intensamente desde que se produjo la explosión para encontrar sobrevivientes o recuperar los cadáveres de los escombros del edificio.
Según el Ministerio de Salud, nueve adultos y cuatro niños continúan hospitalizados y otras 40 personas fueron dadas de alta.
A pocos metros del Parque de la Fraternidad, en el Capitolio Nacional, sede del Parlamento, la bandera cubana ondeaba a media asta, señal del duelo oficial de dos días decretado por Díaz-Canel, que se extenderá hasta la medianoche del sábado.
Según la televisión cubana, los trabajadores del Saratoga ofrecieron el jueves una misa a sus compañeros fallecidos en la emblemática Catedral de La Habana.
Construido en 1880 y transformado en hotel en 1933, el Saratoga era conocido por haber alojado a varias celebridades en los últimos años, entre ellas Mick Jagger, Beyoncé y Madonna.