Tras la toma del congreso, el spread de la deuda aumentó. / DEM


El riesgo país de El Salvador subió unos 20 puntos el fin de semana, revela el Índice de Bonos de Mercados Emergentes (EMBI),comportamiento “atípico” que expertos y economistas atribuyen a la presión del Ejecutivo sobre la Asamblea Legislativa.

El EMBI es un índice elaborado por la entidad financiera estadounidense JP Morgan, que calcula el diferencial o “spread” entre el rendimiento que pagan los bonos emitidos por un país emergente, en este caso El Salvador, y el que paga el bono estadounidense, título considerado “libre de riesgo”.

El spread, que se expresa en puntos básicos (pb), llegó a 401 puntos el pasado 10 de febrero, cuando los mercados bursátiles despertaron a la noticia de la militarización del congreso salvadoreño. Los valores promedio, según representantes del Comité de Riesgo de Pensiones, rondan de 375 a 380 puntos.

El EMBI indica cuánto rendimiento adicional debe ofrecer un país emergente para que un inversionista considere atractivo adquirir su deuda; por lo que, a mayor riesgo, mayor diferencial. En términos simples, esto quiere decir que, al haber un mayor riesgo país, el costo del financiamiento externo para El Salvador, aumentó casi 20 puntos.

 

Estrés de los bonos

Un economista explicó a Diario El Mundo que este incremento, “habiendo tenido un comportamiento casi estable” antes del 9F, revela “el estrés de los bonos”. “Uno tiene que interpretar que si ha subido un día equis es porque algo pasó ese día”, añadió.

El pasado 6 de febrero, revela, el diferencial se ubicó en 382 pb y, el lunes 10 de febrero, sufrió un incremento del 4.9% a 401 pb. Esto presionó el precio del dinero para el país por al menos dos días, hasta que la Sala de lo Constitucional ordenó medidas cautelares el lunes.

La prohibición al uso del Ejército y de medidas de presión a la Asamblea Legislativa, en tanto, llevó tranquilidad a los inversionistas el día 11 de febrero, cuando el spread se ubicó en 396 pb.

La última vez que El Salvador atravesó un incremento al diferencial de sus bonos, se debió al efecto global del coronavirus del 23 al 27 de enero, que presionó el costo del financiamiento a nivel internacional. En ese momento, el spread llegó a los 412 pb para El Salvador.

Las tensiones locales, sin embargo, no deben verse a la ligera, explica el experto.

“Si la cuestión se tranquiliza, se puede decir que el valor del EMBI va a bajar a los niveles normales pero, si la cuestión sigue, va a volver a subir”, auguró.

El Comité destaca que esta variación no necesariamente afectará la calificación de riesgo, pues el impacto en el precio de los bonos puede ser temporal. “Si esta cuestión no llega a más, puede regresar a los niveles normales”, agrega.