Las acciones de AstraZeneca muestran caídas del 6 % desde el anuncio del pasado lunes./AFP.


AstraZeneca y Oxford han reconocido fallos en la administración de las dosis de las vacunas contra el coronavirus, lo que está generando dudas sobre la eficacia del tratamiento. Afirman que hubo un error de fabricación que provocó que algunos de los viales utilizados en el ensayo no tenían la concentración adecuada de vacuna, por lo que algunos voluntarios recibieron media dosis. Sin embargo, sorprendentemente, estos desarrollaron una mayor tasa de efectividad que los que recibieron dos dosis completas.

AstraZeneca y la Universidad de Oxford anunciaron que los ensayos de su vacuna contra el coronavirus mostraban una alta efectividad, pero los resultados eran desconcertantes. El tratamiento alcanzaba el 90% de efectividad cuando se administraba media dosis, pero la respuesta de los voluntarios con dos dosis completas bajaba al 62%.

En un primer momento, los responsables del desarrollo de la vacuna apuntaron a que el mayor nivel de efectividad se había producido porque se había administrado a un grupo de edad de menores de 55 años. Pero ayer la Universidad de Oxford dijo que algunos de los viales utilizados en el ensayo no tenían la concentración adecuada de vacuna, por lo que algunos voluntarios recibieron media dosis.

La universidad dijo que discutió el problema con los reguladores y acordó completar la última etapa del ensayo con dos grupos. El problema de fabricación se ha corregido, según el comunicado, pero la confusión está creciendo alrededor de los resultados de la vacuna y sobre los reguladores.

“Simplemente no puedo entender de dónde viene toda la información y cómo se combina”, dijo Natalie Dean, bioestadística y experta en diseño de ensayos de vacunas en la Universidad de Florida, según menciona The New York Times. Dean escribió en Twitter que:
AstraZeneca y Oxford obtienen una mala calificación de transparencia y rigor cuando se trata de los resultados de los ensayos de vacunas se han reportado".

De acuerdo con El Economista, Geoffrey Porges, analista de SVB Leerink, dijo que pensaba que era poco probable que la vacuna obtuviera la aprobación en Estados Unidos y acusó a AstraZeneca y Oxford de querer exagerar los resultados destacando la mayor eficacia de un subconjunto de la muestra relativamente pequeño.

Los mercados no terminan de confiar en los resultados de la vacuna. Las acciones de AstraZeneca muestran caídas del 6 % desde el anuncio del pasado lunes. Mientras las acciones de Pfizer y BioNTech han ganado un 6 % y un 14 % respectivamente y Moderna ha subido un 11 % por ciento desde que se publicaron los datos del ensayo de la vacuna.

Por su parte, en una entrevista en The New York Times, Menelas Pangalos, el ejecutivo de AstraZeneca a cargo de gran parte de la investigación y el desarrollo de la compañía, defendió el manejo de las pruebas por parte de la compañía y sus divulgaciones públicas. Dijo que el error en la dosificación fue cometido por un contratista y que, una vez que se descubrió, los reguladores fueron notificados de inmediato y aprobaron el plan para seguir probando la vacuna en diferentes dosis.

Pangalos dijo a Reuters el lunes que la compañía no tenía la intención de que ningún participante recibiera la mitad de la dosis.
"La realidad es que podría terminar siendo un error bastante útil. No estaba poniendo a nadie en peligro. Fue un error de dosificación. Todos se movían muy rápido. Corregimos el error y continuamos con el estudio, sin cambios en el estudio, y acordamos con el regulador incluir también a esos pacientes en el análisis del estudio ". dijo Menelas Pangalos, ejecutivo de AstraZeneca en la entrevista con The New York Times el miércoles.

Los inversores parecen estar decepcionados con los resultados turbios, especialmente en comparación con los datos mucho más claros publicados por dos de los principales rivales de AstraZeneca en la carrera por una vacuna contra el coronavirus.

Pfizer y Moderna dijeron este mes que sus vacunas, que utilizan una tecnología conocida como "ARN mensajero", parecen tener una eficacia de alrededor del 95 por ciento. Parece casi seguro que ambas ofertas obtendrán la autorización de emergencia de la FDA en las próximas semanas.

La vacuna AstraZeneca, que utiliza un enfoque diferente que involucra un virus de chimpancé para provocar una respuesta inmune al coronavirus, tenía todas las características de un éxito de taquilla, ya que, es económica, solo unos pocos dólares por dosis, y fácil de producir en masa. A diferencia de las vacunas de Pfizer y Moderna, las de AstraZeneca se pueden almacenar durante meses en refrigeradores normales.