“Él se presentó a los juzgados y la policía se alertó porque nosotros tenemos seguridad al entorno del Órgano Judicial; le colaboró al juez que lleva la causa, llegó fiscalía a verificar si se trataba de él, y al final la disposición del juez fue darle arresto domiciliar”, dijo ayer Arriaza.
El viernes pasado, la Fiscalía General de la República y el mismo presidente, Nayib Bukele, confirmaron la captura de Cáceres, en la noche.
Cáceres tenía una orden de captura pendiente desde el 11 de junio de 2018, cuando el juzgado Quinto de Paz ordenó su arresto por los delitos de peculado y lavado de dinero en el caso conocido como “Saqueo Público”, donde Funes es señalado de desviar $351 millones de las cuentas de Casa Presidencial a cuentas de terceros, para pagos de tarjetas de crédito, ocio y cirugías estéticas.
Ayer, el director policial confirmó que ellos solo cumplen una disposición judicial ejecutando el arresto en la residencia de Cáceres Zaldaña.
En junio de 2018, la Fiscalía General de la República acusó a Cáceres de no justificar fondos por $1,567,659.21, parte de eso para pagos de 63 viajes de placer de él y otros, todos fondos de Casa Presidencial. También pagó siete de ocho préstamos entre 2009 y 2014 por un monto de $1.2 millones.
La noche de su arresto, el presidente de la República, Nayib Bukele, dijo que su detención les ayudaría para tener más información en los casos donde es acusado el expresidente Mauricio Funes, y abrir nuevas acusaciones.
“No solo para robustecer los casos que ya pesan contra el expresidente Funes, sino probables nuevos casos que vengan derivados de la información que se obtenga”, dijo Bukele.