Expresidente Porfirio Lobo Sosa. Archivo DEM


 

Mientras el expresidente hondureño Porfirio Lobo Sosa guarda completo silencio sin apariciones públicas, los medios de la vecina Honduras reproducen un informe de la Fiscalía de EE.UU. que lo vincula con el narcotráfico.

La agencia francesa de noticias AFP, que tuvo acceso al documento judicial de la Fiscalía de Nueva York, indica que el exmandatario hondureño acordó proteger a narcotraficantes junto a su hijo Fabio a cambio de sobornos.

El informe recoge la declaraciones del exjefe del cártel Los Cachiros, Devis Leonel Rivera.

Las explosivas acusaciones de este exjefe narco, testigo del gobierno en el caso contra Fabio Lobo, han sacudido Honduras.

Fabio Lobo, hijo del expresidente Lobo, es acusado por el gobierno estadounidense de conspiración para enviar cocaína a Estados Unidos y está preso en Nueva York desde mayo de 2015.

Rivera asegura que además de Fabio Lobo, el expresidente Lobo, el actual ministro de Seguridad, Julián, dos diputados, un alcalde y el hermano del actual presidente Juan Orlando Hernández tuvieron vínculos con el narcotráfico.

El documento de la Fiscalía neoyorquina indica que "en 2009 cuando Lobo Sosa buscaba la presidencia de Honduras, el acusado (Fabio Lobo, hijo del exmandatario) se unió a una conspiración para traficar drogas con su padre y otros al aceptar sobornos a cambio de proteger y asistir a traficantes en Honduras" y añade que "los líderes de Los Cachiros le pagaron aproximadamente $500 mil a cambio de protección política de investigaciones policiales, impedir la extradición a EE.UU. y el otorgamiento de contratos de agencias gubernamentales a compañías fachada para lavar dinero controladas por Los Cachiros".

El memorando del gobierno estadounidense subraya que durante el gobierno del expresidente Lobo no hubo ninguna extradición.

Reacción local

El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos de Honduras, Roberto Herrera, instó el sábado a la Fiscalía a investigar las acusaciones del narcotraficante Devis Leonel Rivera, quien ha declarado que pagó sobornos al expresidente Porfirio Lobo y al diputado hondureño Antonio Hernández.

"El camino adecuado para encontrar la verdad es que las denuncias sean investigadas y que las personas vinculadas se sometan a la justicia", dijo Herrera en un comunicado.

Enfatizó que hasta ahora todas los señalados por Rivera son consideradas "inocentes mientras no se les pruebe su culpabilidad y sean condenados por ese hecho".

Rivera, exlíder del desmantelado cártel de Los Cachiros, declaró la semana anterior en un tribunal de Nueva York (EE.UU.) que pagó sobornos a al expresidente Lobo (2010-2014) y otros funcionarios a cambio de que le brindarán protección.

Rivera, quien está detenido en Nueva York desde 2015 cuando se entregó a la justicia de EE.UU., también declaró, esta semana, que pagó sobornos entre 2013 y 2015 al diputado hondureño Antonio Hernández, hermano del gobernante Juan Orlando Hernández, para que el Gobierno agilizara una deuda pendiente con una empresa que esa organización criminal utilizaba para lavar dinero.

También ha implicado en su denuncia al actual ministro de Seguridad de Honduras, Julián Pacheco, quien era asesor en asuntos de narcotráfico durante el Gobierno que presidió Lobo.

Todos los señalados por Rivera han negado sus acusaciones.