La Federación Salvadoreña de Fútbol (Fesfut) y los presidentes de las tres divisiones profesionales del balompié nacional tuvieron una reunión extraordinaria para determinar el futuro de las competencias ante la alerta roja emitida por el presidente de la república, Nayib Bukele, al reducir la aglomeración de personas de 500 a 200.

El presidente de la Fesfut, Hugo Carrillo, informó la posición ante las medidas preventivas del gobierno: “Hemos llegado a la conclusión de que el fútbol se suspende por 30 días, reanudamos hasta el 18 o 19 de abril”.

Durante la suspensión de 30 días “los jugadores los van a ocupar para prepararse y mantenerse activos para la reanudación del torneo Clausura”.

Con respecto a sus salarios, Carrillo dijo que “vamos a cancelar a todos los jugadores y cuerpo técnico de los equipos el 50% de los contratos”.

En ese sentido, el presidente de la Segunda División, David Linares explicó que en la reunión las tres divisiones del fútbol nacional acordaron “determinar el próximo martes, en una reunión de asamblea extraordinaria, qué mecanismo vamos a ocupar para poder paliar la situación con los equipos”.

Con respecto a los patrocinadores de los equipos, explicó que la extensión de la agenda de competencia de la primera división será para ayudarlos a que cumplan sus compromisos con los clubes.

Además, el presidente de la Primera División, Samuel Gálvez, fue crítico en decir que “las juntas directivas van a tener que meterse la mano a la bolsa para poder pagarles a los jugadores, en el caso de los equipos pequeños”.