La Comisión Política de la Asamblea culminó sin acuerdos en financiamiento de la emergencia. / Óscar Machón


El Gobierno salvadoreño no entregará una proyección de los gastos que hará como parte de los $3,000 millones de deuda para atender la emergencia, hasta que la Asamblea Legislativa ratifique y transfiera todos los recursos a las arcas del Estado.

El financiamiento a los compromisos del Estado durante la pandemia de COVID-19 ya alcanzó un punto muerto. El congreso ha autorizado negociar deuda por hasta $3,000 millones para subsidios a familias y empresas afectadas por la crisis; sin embargo, no se han transferido los primeros créditos al Gobierno bajo el argumento de la falta de transparencia.

Arena pide informe de los más de $513 millones que ya gastó el Gobierno en la emergencia, mientras el FMLN exige que se entregue un presupuesto extraordinario para especificar en qué gastará los recursos; pero el Gobierno no ha cedido.

“Una vez se finalicen los procesos de negociación y se cumplan con los respectivos trámites legislativos que permitan los desembolsos de fondos, este Despacho presentará la iniciativa de Ley que contenga el Presupuesto Extraordinario”, revela un informe de Hacienda entregado al congreso a mediados de mayo.

Las últimas reuniones para definir la ley de emergencia tampoco han rendido frutos. “En cuanto traiga ese presupuesto, ese tema puede andar”, respondió Yanci Urbina, diputada del FMLN, ante la insistencia del ministro de Hacienda, Nelson Fuentes, para que se permita la transferencia de $389 millones del Fondo Monetario Internacional (FMI) al presupuesto general.

Este crédito fue aprobado y ratificado, pero su traslado a las cuentas del Estado sufrió un impasse desde que se desintegró el Comité del Fondo de Emergencia, hace más de un mes. Desde entonces, diputados de Arena y del PDC han pedido al Gobierno que entregue informes por su cuenta, sin obtener respuestas satisfactorias.

La exigencia por los créditos surgió al discutir el subsidio que debe garantizar el Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS) para el salario de salvadoreños en cuarentena.Los fondos para este programa de subsidio se pagarán con parte de los $3,000 millones.

El titular de Hacienda reclamó que los recursos siguen en el pleno legislativo. y debería avanzarse en la incorporación de los primeros $389 millones.

“Cuando haya traído ese presupuesto en la tarde, o a la hora que sea la plenaria, a esa hora lo vemos”, sentenció Urbina. Fuentes ya adelantó en varias ocasiones que la falta de liquidez afectará el pago de salarios en junio.