El gobernante nicaragüense Daniel Ortega, pone su brazo sobre el hombro de Rafael Solís, en esta foto de archivo del diario La Prensa de Managua.


 

El magistrado de la Corte Suprema de Nicaragua y uno de los más cercanos colaboradores del gobernante Daniel Ortega, Rafael Solís Cerda, renunció sorpresivamente esta noche a su cargo y denunció al régimen al que hasta ahora servía acusándolo de establecer el terror y violar derechos humanos.

"Siempre creí que la sensatez y la cordura se podía imponer en ustedes y proceder a una negociación política que permitiera el adelanto de las elecciones y algunos de los otros puntos planteados por la oposición pero la realidad ha demostrado todo lo contrario y verdaderamente un Estado de Terror con el uso excesivo de fuerzas parapoliciales o aun de la Policía misma con armas de guerra, han sembrado el miedo en nuestro país y ya no existe derecho alguno que se respete, con las consecuencias inevitables de la instalación y la consolidación al menos de una dictadura con caracteres de monarquía absoluta de dos reyes que ha hecho desaparecer todos los Poderes del Estado, dejando al mismo Poder Judicial al que yo pertenezco reducido a su más mínima expresión", escribió Solís Cerda.

El exmagistrado hizo sus comentarios en una carta hecha pública en redes sociales y luego confirmada a medios de comunicación nicaragüense por el propio Solís, quien se confesaba públicamente militante del gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).

Precisamente Solís no solo renuncia a su puesto sino también a la militancia del FSLN.

Medios nicaragüenses recordaron que Solís fue el cerebro de la reelección de Ortega, concedida en una resolución de la Corte Suprema de Justicia y que violó la propia Constitución nicaragüense.

"Todavía pueden los Magistrados, de los Tribunales de Apelación o en nuestro caso, los Magistrados de la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia revertir estas decisiones, pero es sumamente difícil que por el Estado de Terror impuesto, alguno de ellos se atreva a hacerlo en el futuro, y yo mismo voy a estar fuera del Poder Judicial y probablemente fuera de Nicaragua por un tiempo y no tengo por tanto el derecho de exigirles, por lo que estas condenas seguramente van a ser ratificadas y ojalá no estén presos por mucho tiempo ( las mayorías son condenas de 30 años)", continuó Solís.

El exfuncionario acusó a Ortega y su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo de ilegalmente "suprimir el derecho a la gente de protestar en las calles, y hay periodistas muertos, periodistas presos y sobretodo una gran cantidad de periodistas en el exilio, y los pocos que quedan en Nicaragua poco a poco van a ser reprimidos y tendrán que irse al exilio o terminarán en la cárcel".

Solís acusó a la pareja gobernante encaminar a Nicaragua a una guerra civil y advirtió que "también es lógico esperar que los grupos de oposición van a buscar como armarse y el país va a retroceder cuarenta años, y volver, si es que no estamos ya, a esos ciclos de violencia tan característicos a lo largo de nuestra historia".

"La OEA va a terminar expulsando a Nicaragua tarde o temprano consiguiendo Almagro los 24 votos y los Estados Unidos van a continuar con su política de aplicar sanciones al país hasta ahogarlo económicamente y mientras tanto, la vía armada cobrará fuerza, ustedes se van a aferrar al poder y de ahí no van a salir, si no es por la fuerza, pero todo mundo está claro que es muy difícil llegar a las elecciones del 2021", agrega en la misiva.