La masacre no ha sido resuelta a más de un mes de haber sido cometida. / DEM


El director de la Policía Nacional Civil (PNC), Howard Cotto, dijo que presuntamente fueron asesinados dos pandilleros que habrían participado en la muerte de la familia de Omar Pimentel, preparador físico del Sonsonate FC.

Cotto señaló ayer que “dentro de los posibles hechores que no han sido detenidos, hay dos que presumiblemente fueron asesinados, precisamente para que no saliera a la luz más información de este hecho”, dijo.

Cotto no dijo quiénes son los pandilleros asesinados, ni cuándo ocurrieron los hechos; añadió que han habido avances en las investigaciones y que no descartaban ninguna línea de investigación sin revelar cuáles son.

Por ese crimen están presas seis personas, entre éstas tres pandilleros que habrían actuado intelectual y materialmente en la masacre.

Se trata de Ronald Valencia Aguilar, principal sospechoso de haber dirigido y participado en la muerte de las cinco personas, recluido en el penal de máxima seguridad de Zacatecoluca.

Otros sospechosos detenidos por su presunta participación son: Carlos Eduardo Cerna López y Willian Martínez Ramos. Tambien fue detenida Jenni Isaura Mendoza, compañera de vida de Martínez.

A estas capturas, se suman Felipe Lue Flores y Bessy Segura Cardona, supuestamente por no haber informado a la PNC sobre el carro de la familia Pimentel, abandonado en la finca Los Trozos, donde residían.

La familia Pimentel fue privada de libertad la noche del 16 de enero en la calle Los Naranjos, a la altura del cantón Los Arenales, de Nahuizalco, Sonsonate, cuando regresaban de presenciar un partido de fútbol en la ciudad de Sonsonate. Los cadáveres fueron descubiertos el 8 de febrero, en una fosa común, junto al camino que va a la finca Los Trozos, después de más de 22 días de búsqueda.

Ahí fueron encontrados los restos de Rosa Ivett Colindres de Pimentel; su hijo Marco Antonio, Carlos Colindres, Silvia Jaco de Colindres y Tania Monterrosa.