El Ministro de Deportes italiano Vincenzo Spadafora pidió este domingo la inmediata suspensión de la Serie A de fútbol como consecuencia de la epidemia del nuevo coronavirus que ha provocado ya 233 fallecidos en ese país.

"No tiene sentido ahora, cuando estamos pidiendo a los ciudadanos enormes sacrificios para prevenir la propagación de la epidemia, poner en peligro la vida de jugadores, árbitros, aficionados que seguramente se reunirán para ver los partidos, no suspender temporalmente el fútbol", declaró Spadafora en un mensaje publicado en Facebook.

La jornada 26ª de la Serie A por el momento no se ha suspendido, aunque en caso de disputarse partidos, los estadios no tendrán público.

La fecha tiene como principal partido el que enfrente a la Juventus y al Inter, segundo y tercero, que puede resultar decisivo de cara a la lucha por el 'Scudetto'.

La jornada dominical tenía que comenzar con un Parma-SPALT, aunque el equipo de la región de Emilia-Romaña, una de las más afectadas por el virus, informó en sus redes sociales que el duelo se retrasaría.

Italia es el mayor foco de contagio por el COVID-19, con más de 5.880 casos y 233 decesos, según el último balance.

La epidemia originada en China afecta ya a 98 países, con 105.836 casos de infección y 3.595 muertes, según un balance establecido por la AFP sobre la base de fuentes oficiales.

Ante la rápida propagación de la epidemia, el gobierno italiano decretó este domingo medidas excepcionales de confinamiento, hasta el 3 de abril, de millones de italianos que viven en el norte del país.

Los desplazamientos de al menos 15 millones de italianos que viven en esa zona estarán estrictamente limitados a partir de este domingo.

Solo serán posibles los desplazamientos que obedezcan a "imperativos profesionales verificables y a situaciones de urgencia por razones de salud".

Esas medidas son similares a las que tomó China en la provincia de Hubei, donde surgió la epidemia en diciembre pasado y donde fueron aislados en cuarentena 56 millones de personas.