Él era un playboy desenfrenado, pero sentó cabeza. Ella, una relajada actriz californiana que tuvo que adaptar su estilo cuando se convirtió en duquesa. Pero juntos, Enrique y Meghan, se convirtieron en padres ayer y con esto han logrado conquistar a la opinión pública dentro y fuera de Reino Unido.

Rompiendo con la tradición, la pareja anunció el nacimiento de su primer hijo en Instagram, pero, aunque ofrecen la imagen de una pareja moderna, también deberán respetar unas reglas que en algunos casos son ancestrales.

“Es un bebé muy saludable”, dijo el padre en Windsor sobre su vástago, un varón que ocupará el séptimo puesto en la línea de sucesión a la Corona de su bisabuela Isabel II.

La popularidad de Enrique y Meghan Markle es tan grande que abrieron una cuenta Instagram el 2 de abril y en menos de seis horas alcanzaron el millón de seguidores, batiendo un récord mundial.

La joven pareja, que ofrece una imagen de modernidad, desenfado y compromiso con causas sociales, ya atrajo a las multitudes durante su primer viaje oficial en octubre por las excolonias británicas del Pacífico.

 

De juerguista a padre de familia

Muchos guardan todavía en la memoria la imagen del adolescente con aire perdido que caminaba junto a su hermano Guillermo siguiendo el féretro de su madre, la princesa Diana, por las calles de Londres en 1997.

Cuando nació Enrique, el 15 de septiembre de 1984, era tercero en el orden sucesorio, una posición que exigía un comportamiento ejemplar.

Sin embargo, el enérgico pelirrojo confesó a los 17 años haber fumado cannabis y su afición por las fiestas regadas de alcohol lo convirtió en una de las personalidades favoritas de la prensa sensacionalista.

 

De actriz a duquesa

Pero lo que pareció transformarlo definitivamente fue conocer en 2016 a la actriz Meghan Markle.

Hija de Thomas Markle, un director de iluminación de televisión que ganó un Emmy por su trabajo en la serie “Hospital General”, y de Doria Ragland, asistente social y profesora de yoga, Meghan nació el 4 de agosto de 1981 en Los Ángeles.

Por parte de madre, desciende de los esclavos negros de las plantaciones de algodón de Georgia, en el sur de Estados Unidos. Por parte de padre, es descendiente del rey Roberto I de Escocia, que reinó entre 1306 y 1329.

La actriz alcanzó la fama gracias a la televisión, trabajando en la serie “Suits”, sobre un bufete de abogados de Nueva York.

Antes de contraer matrimonio con Enrique estuvo casada con el productor Trevor Engelson, del que se divorció al cabo de dos años.