La reforma a la Ley del impuesto sobre la renta aprobada el martes establece claramente que todo el dinero "proveniente de cualquier clase de fuente en el exterior" no pagará impuesto cuando un salvadoreño realice su declaración de renta en el Ministerio de Hacienda, por lo que legisladores enfatizaron en que los grandes beneficiados serán muchos salvadoreños en el exterior que quieren invertir en El Salvador.

Aunque el diputado William Soriano haya dicho "estamos solicitando que las remesas familiares sean excluidas del Impuesto sobre la Renta", la reforma no hace ninguna referencia a las remesas, sino a todo tipo de dinero o especie que ingrese del exterior; todo esos fondos será renta no gravada.

En otras palabras, no pagarán impuesto:
  • Todos los valores que se reciban en cualquier concepto obtenidos en el exterior.
  • Cualquier movimiento de capital obtenido en el exterior de cualquier clase de fuente.
  • Remuneración o emolumento, en dinero o especie, generado o no por la inversión de capital nacional o extranjero, proveniente de cualquier clase de fuente en el exterior.

Soriano explicó que muchos salvadoreños en el extranjero tienen cadenas hoteleras y supermercados en otros países con los cuales han generado un "capital importante, pero que no lo podían traer al país porque simple y sencillamente el costo de ingresar ese dinero a El Salvador era muy alto". Ahora, dijo, El Salvador es más competitivo para captar dichos fondos.

La reforma, aunque no menciona expresamente a la diáspora, especifica que todos los valores provenientes de cualquier fuente en el exterior no serán gravados con el Impuesto sobre la Renta.

El expresidente del BCR, Carlos Acevedo, explicó a Diario El Mundo que el espíritu de esta reforma es incentivar la llegada de capitales del exterior, "por ejemplo, de la diáspora, para invertir en el país"

Entiendo que al final de cuentas se quiere incentivar la inversión financiera de la diáspora.
Carlos Acevedo, expresidente del BCR, a Diario El Mundo.


También, el economista Rafael Lemus ve un interés por facilitar la llegada de capitales a El Salvador. El dictamen que llegó a la sesión plenaria fue distinto al aprobado en la Comisión de Hacienda de la Asamblea Legislativa, pasó de tener ocho a dos páginas.

Varios artículos que fueron eliminados a última hora tenían que ver con trámites que debían hacer las personas que habían percibido ganancias o rentas del exterior y que podían ser engorrosas. Lemus interpreta esta eliminación como que buscan "la manera de simplificar" y quitar los procedimientos de constatación de la renta obtenida en el exterior y hacer el "neteo" –calcular el valor neto– con la renta local.

En el 27 también están quitando todo ese procedimiento de cómo constatar la renta, cómo quedó en el exterior y hacer el neteo con la renta local, se han percatado de que eso es muy engorroso, están tratando la manera de que sea lo más laxo, lo más simple todas las entradas de capital y no meterse al tema de diferenciar entre lo obtenido allá y el neto de acá. Quieren lo más tranquilo que es: ¿trae fondos de afuera?, vaya, no paga". Rafael Lemus, economista.


Marvin Sorto, director de Impuestos Internos del Ministerio de Hacienda, mencionó las remesas como las principales beneficiadas: "Lo que ahora queremos es que las remesas sean consideradas rentas excluidas. Si un hermano de la diáspora decide invertir en el país sea renta excluida". Sin embargo, la oposición aclaró que los salvadoreños nunca han pagado Impuestos sobre la Renta que reciben en remesas familiares, por lo que en la reforma se dejó claro que todo tipo de capital del exterior.

La reforma iniciará su vigencia ocho días después de su publicación en el Diario Oficial.