Rebeca estudia mandarín este año, las clases en China han sido aplazadas. / Cortesía Rebeca Castrillo


Ruth Castrillo es la madre de Rebeca Díaz Castrillo, una becaria salvadoreña en Wuhan, China, que atraviesa uno de los momentos más angustiantes en su vida, preocupada por la epidemia del coronavirus que aisló y relegó a millones en el gigante asiático, incluyendo a su hija.

Según explica Ruth, la situación de Rebeca y los demás becarios es desesperante, debido a que permanecen aislados y, poco a poco, los estudiantes que viven en una residencia universitaria en la Central China Normal University, se quedan sin alimentos.

“Me preocupa lo del virus, porque mi hija me contó que salieron a una tienda a comprar alimentos, fueron a la tienda y solo encontraron pan de caja y le preguntaron a la señora dueña si les iba a vender más comida y ella les dijo que no, porque no hay quien le venda a ella y al no tener nada, les dijo que va a tener que cerrar todo”, asegura Ruth.

Sentada en el comedor de su casa, Ruth indica que la mamá de Daniela López, otra joven becaria, también está preocupada por la posible escasez de alimentos que enfrenten las jóvenes, “Nos preocupa que puedan quedarse sin comida”.

En su primer año en China para adaptarse al país, Rebeca estudia mandarín y posteriormente iniciará la licenciatura en Educación, según dijo su mamá. Obtener esa beca para la joven fue la única opción para seguir estudiando, debido a que la joven dejó la universidad porque su mamá enfermó.

Asimismo, Ruth pidió a la cancillería salvadoreña se le brinde información a todos los padres de becados sobre el proceso que seguirán para informar sobre la salud de los estudiantes o si pueden traer a los salvadoreños al país para esperar que se encuentre la cura contra el coronavirus.

“Nosotros en la iglesia nos mantenemos en oración por todos en China, hablo con ella todos los días cuando allá es de noche, ella continúa viviendo en la ciudad y allá les dieron mascarillas y alcohol para no contagiarse”, asevera Ruth.

El Gobierno señaló ayer que en la República Popular de China, actualmente hay 80 jóvenes salvadoreños becados y tres de los connacionales están alojados en Wuhan, epicentro del coronavirus.

Las jóvenes salvadoreñas en Wuhan no han sido evacuadas y siguen aisladas en la residencia universitaria en la Central China Normal University. “Si es verdad, del Ministerio de Relaciones Exteriores se han comunicado con nosotros para ver qué pueden hacer por nosotros, pero seguimos aquí”, dijo ayer Rebeca a Diario El Mundo.

 

OMS eleva amenaza mundial por coronavirus

El coronavirus está generando una angustia creciente en el mundo ante los 106 fallecidos y más de 4,000 infectados en China, mientras la OMS elevó la amenaza internacional de la epidemia a “alta”. El miedo ha traspasado fronteras. Mongolia se convirtió en el primer país que cierra las carreteras que le unen a China. Las personas procedentes de la provincia china de Hubei, la más afectada, no podrán entrar en Malasia.

Alemania, Turquía y Estados Unidos, que ha ofrecido “cualquier ayuda que sea necesaria” al gigante asiático, desaconsejaron a sus ciudadanos que viajen a China, mientras Francia, Estados Unidos, Japón y Marruecos preparan la evacuación de sus ciudadanos. Hay medio centenar de infectados en todo el mundo, el último, un caso en Alemania confirmado ayer.

La mamá de Rebeca muestra el diploma que le entregó la embajada de China en El Salvador, al ganar una beca. / J.C. Villafranco