Las 80 páginas del libro del Proyecto Ángeles se quedan cortas para explicar la ambiciosa visión de las enfermeras y enfermeros salvadoreños para capacitarse y sentar bases sólidas de formación a futuras generaciones de esa noble vocación.

Con apoyo de la Cooperación Internacional de Japón (Jica), la unidad nacional de enfermería del Ministerio de Salud desarrolló tres proyectos desde 1997, dos fueron el preámbulo del denominado Ángeles.

Los proyectos han sido condensados en un libro que será presentado hoy al personal de enfermería del Ministerio de Salud y a la misma Cooperación Japonesa.

El primero tuvo una duración de cinco años y se le apostó a la educación básica de enfermería. “Vinieron expertos japoneses, hubo personal que viajó a Japón, de ahí surgieron 17 expertas salvadoreñas”, dice Concepción Castaneda, jefa de la unidad de enfermería del Ministerio de Salud.

Ahí se abordaron cinco componentes: desarrollo curricular, integración docente servicio, salud comunitaria, enfermería en proceso de atención, y salud sexual y reproductiva.

El segundo proyecto fue el de la capacitación de terceros países, desde el 2002 al 2006. “Recibimos las competencias de las expertas japonesas y de igual manera las facilitadoras salvadoreñas se trasladaron a los países de la región”, agrega Castaneda.



Proyecto emblema

Desde el 2007 hasta el 2011, la Cooperación Japonesa financió y dio los elementos para el tercer proyecto denominado Ángeles.

Se titula: “Fortalecimiento de la educación básica y permanente de enfermería en El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y República dominicana”, y su único fin es mejorar la calidad de educación permanente en el personal de enfermería.

Se trabajó en dos modalidades: un programa de becas en Japón y la asesoría y capacitación por expertas japonesas contratadas para periodos de corto y largo plazo.

Según el libro, el Jica mandó al país a ocho expertos para un largo plazo y 13 de corto, y el gran legado fue elaborar una currícula educativa para la formación de las próximas generaciones del personal de enfermería.

También se conformaron comités -uno de ellos para elaborar la currícula- nueve en total, donde también se planteó la elaboración de libros de texto, evaluación de la educación, planeamiento didáctico, desarrollo curricular, el proceso de atención de enfermería, enfermería comunitaria, integración docencia servicio y la elaboración de vídeos educativos.

Las enfermeras destacan que las capacitaciones bajo el proyecto Ángeles han sido en cuidados paliativos, enfermedades renales, diabetes, procesos de la calidad, cuidados neonatales y, principalmente, han ayudado a bajar las muertes maternas de 157 en 1990 a 54 en 2015, según el Minsal.