El riesgo país sube ante la incertidumbre por la capacidad de pago.


La destitución de los magistrados de la Sala de lo Constitucional y el fiscal general, así como la adopción del bitcoin como moneda de curso legal mantienen el riesgo país de El Salvador en niveles similares a los observados en el confinamiento y como el tercero más alto de América Latina, destacó ayer la Universidad Francisco Gavidia (UFG).

En su último informe socioeconómico, presentado por el Observatorio de Políticas Pública de la UFG, se destacó la tendencia al alza del indicador de riesgo país (EMBI) de El Salvador, que en el último mes ha marcado un récord histórico al colocarse en 11.15 puntos el 28 de septiembre, no visto desde que se tiene data disponible de 2007.

El EMBI es calculado por J.P. Morgan Chase basado en el comportamiento de la deuda externa de un mercado emergente, donde básicamente entre más certidumbre de pago, menor es, mientras que se eleva cuando hay riesgo de impago.

Este indicador se elevó durante el confinamiento en 2020 por el temor de que el país no pudiera cumplir sus compromisos de deuda y comenzó a bajar con la reapertura económica. Sin embargo, desde septiembre, cuando entró en vigencia la Ley Bitcoin, comenzó a elevarse de nuevo y se mantiene por arriba de los 10 puntos.

El EMBI del 25 de octubre, último dato disponible, se colocó en 10.29 puntos, un 15.4 % superior al 8.91 observado el 7 de septiembre pasado. Actualmente, El Salvador es el tercer país de América Latina con más riesgo, solo superado por Argentina y Venezuela.


Deuda más cara.


Claudio de Rosa, investigador asociado de la UFG, explicó que, si el Gobierno decidiera salir a emitir deuda, en las actuales condiciones, tendría que ofrecer una tasa de interés superior al 14 %.

Esto sería porque el EMBI es una referencia sobre la tasa de interés que deben ofrecer los mercados emergentes para emitir nueva deuda. Por ejemplo, si El Salvador tuvo el 25 de octubre un riesgo de 10.29 puntos, a ese se le debe agregar la tasa que pagan los bonos del Tesoro de Estados Unidos que ronda el 1.6 % y así, si quiere colocar deuda, tendría que ofrecer un cupón por arriba del 12 % en intereses.

Uno de los temores del mercado es que el Gobierno salvadoreño no pueda conseguir el financiamiento para honrar $800 millones en bonos que se vencen en enero de 2023 si no hay acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). El economista de Rosa destacó que el impago es “un riesgo”, pero existe la posibilidad de renegociar con algunos acreedores los plazos de deuda.
Lo más adecuado es lograr un acuerdo con el FMI, renegociar y ver cómo se amplían los plazos de nuestra deuda como país”.
Claudio de Rosa
Investigador asociado de la UFG

El estudio de la UFG hizo énfasis en que la deuda pública total de El Salvador se mantiene en crecimiento y aumentó $847 millones en los primeros ocho meses de 2021, hasta llegar a $23,472 millones. Esto representa un 88.6 % del Producto Interno Bruto (PIB).

3 datos fiscales destacados por la UFG



  1. Déficit: el déficit fiscal del SPNF mostró una reducción a agosto de 2021 a $738 millones desde los $1,382 millones reportados en el mismo período de 2020.

  2. Deuda: la deuda pública total aumentó $847 millones en los primeros ocho meses de 2021 y llegó a $23,472 millones a agosto, 88.6 % del PIB previsto para este año.

  3. Agregado: el medio circulante (depósitos de ahorro o certificados de depósito) bajó $23 millones a agosto. Deterioro en la disponibilidad de dinero.