Las familias salvadoreñas solicitaron en julio pasado cerca de $8.56 millones en créditos a las instituciones financieras que operan en El Salvador para la compra de una vivienda, indicó ayer Giuseppe Angelucci, presidente de la Cámara Salvadoreña de la Construcción (Casalco).

Citando datos oficiales del Banco Central de Reserva (BCR) y de la Superintendencia del Sistema Financiero (SSF), el vocero de la gremial indicó que de enero a julio pasado los créditos para vivienda totalizaron $39.25 millones, con un crecimiento de $8.56 millones frente a los $30.69 millones registrados hasta junio.

Los créditos otorgados por bancos, bancos cooperativos y sociedades de ahorro y crédito (SAC) para la industria de construcción también crecieron y sumaron $37.20 millones a julio. Este monto fue $12.87 millones adicionales a los $24.33 millones registrados en el primer semestre de 2019.

“Las cifras dan una clara muestra de la recuperación que nuestro sector ha empezado a experimentar; pero, para que se mantenga es necesario e importante el acompañamiento del sector productivo, sector laboral, Gobierno central y, por supuesto, el sector financiero, sin el cual ninguno de los proyectos u obras que se pretenden realizar serían posibles”, indicó Angelucci este martes durante un conversatorio con autoridades del BCR y la SSF.

La industria de la construcción y actividades afines representan el 12.5% del Producto Interno Bruto (PIB), que mide la producción nacional de bienes y servicios. La gremial prevé que esa participación crezca en los próximos tres años por el aumento de proyectos inmobiliarios y corporativos de la región central, estimados en unos $800 millones.

“Estamos por iniciar el último trimestre del 2019, manteniendo expectativas de crecimiento del 7%, con el cual se cerró 2018, e idealmente, según la última tendencia reportada por el BCR, podemos alcanzar un crecimiento de un 8% a 9% para el 2019”, manifestó el presidente de la gremial, al tiempo que aseguró que los empresarios “continúan comprometidos en invertir en el país, que debe ser apoyado en la ejecución de la obra pública realizada por el Gobierno central y municipalidades”.

Los datos del BCR indican que la inversión privada sumó al término de 2018 cerca de $3,740 millones, impulsada por el crecimiento del sector de construcción que aportó el 42 % de ese capital y se mantuvo como uno de los principales motores de la economía salvadoreña.

Por otra parte, Federico Paredes, presidente del BCR, indicó que es necesario brindar a la industria herramientas para desarrollarse a través de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) y las titularizadoras. “Es importante impulsar la reactivación del sector construcción, por su relación con diversas ramas productivas y creación de empleos. Como parte (de la) agenda de trabajo, analizaremos nuevos instrumentos financieros y plazos largos en mejores condiciones financieras”, sumó el funcionario.