Unilever implementó cambios en sus procesos de producción para reducir el consumo de agua y electricidad, así como priorizar el reciclaje de residuos. Cortesía

La multinacional Unilever reafirmó su compromiso social y ambiental en El Salvador a través de acciones para reducir su huella en los procesos productivos.


Unilever, especializada en marcas de alimentación y cosméticos, lidera en los países donde tiene presencia su Plan de Vida Sostenible (USLP, por sus siglas en inglés). Esta estrategia pretenden mejorar la salud, el bienestar y medios de vida de más de 1,000 millones de personas en 2020, así como reducir su impacto ambiental a la mitad para 2030.


Bajo ese enfoque, el gigante anglo-holandés implementa en El Salvador desde 2016 el proyecto Shakti, una plataforma de distribución de las marcas de Unilever y que abarca capacitaciones sobre emprendimiento, liderazgo y autoestima para las mujeres. Se ejecuta en alianza con la Fundación Salvadoreña de Apoyo Integral (FUSAI) y con el apoyo del Laboratorio de Innovación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID Lab) y el Fondo Japonés.


Al cierre de 2019, detalló la compañía, se beneficiaron más de 500 salvadoreñas y la plataforma cuenta con 860 mujeres inscritas, en ocho departamentos del país. “Shakti brinda herramientas de empoderamiento y gestión (...) facilita que quienes se unen puedan generar sus propios ingresos”, comentó Marina Rodríguez, gerente de Asuntos Corporativos y Sostenibilidad de Unilever para Centroamérica.


En medio ambiente, la compañía mantiene su inversión de $30,000 para cambiar sus procesos de producción de la planta de alimentos y detergentes en cuando al consumo de agua y energía eléctrica. Logró reducir el uso hídrico de 0.25 metros cúbitos a 0.17 por tonelada de detergente producido entre 2008 y 2018, aseguró.



Energía y reciclaje


La compañía se comprometió este 2019 a funcionar con electricidad generada 100 % por tecnologías renovables en todas sus oficinas, fábricas, almacenes y centros de distribución en los cinco continentes donde opera. Esta estrategia la ejecuta a través de acuerdo de compra de energía (PPA) corporativos y tarifas verdes, que suministran el 38 % de la electricidad.


En octubre pasado, la compañía anunció un plan para reducir a la mitad el uso de plásticos vírgenes en los próximos cinco años y aseguró que pondrá en circulación materiales reciclados mientras prepara soluciones para empaques de uso múltiple (reutilizables o recargables) o que no requieran plástico.


La estrategia de reducir el uso de plásticos ya ejecuta en alianza con Holcim, a través de su filial Geocycle. Unilever implementó en El Salvador un proceso de clasificación de los desechos industriales y solo en 2019 se procesaron más de 20,000 toneladas mensuales que no llegaron al relleno sanitario, indicó.