La Fiscalía General de la República (FGR) presentó este jueves la solicitud de extinción de dominio de 152 bienes e inmuebles pertenecientes al supuesto jefe narco, Luis Alfonso Amaya Pineda y a su grupo familiar, Zaida Lissth Candel Osorio, Juan Alfredo Amaya Pineda y Alba iris del Rosario Escoto, por haber sido adquiridos supuestamente po el tráfico ilícito de drogas.

El presunto jefe narco y su esposa Zaida Candel fueron capturados en febrero del 2023, cuando se les incautó en su vivienda siete kilos de cocaína valuada en $197,449. El supuesto jefe narco murió el pasado 10 de abril al interior del penal donde se encontraba en detención provisional.

En la solicitud de extinción de dominio, la Fiscalía pide que 134 inmuebles ubicados en la Costa del Sol, en los departamentos de La Paz, Sonsonate, La Libertad y San Salvador pasen a ser administrados por el Estado.

Así mismo, 14 vehículos, y seis productos financieros que tienen un saldo aproximado de $2.492,000. Todos los bienes e inmuebles, según la Fiscalía, fueron obtenidos producto del tráfico ilícito de drogas.

El Juzgado Especializado de Extinción de Dominio de San Salvador deberá de analizar la solicitud sobre si reúne los requisitos de admisibilidad y posteriormente notificará a los afectados sobre el proceso de extinción.

La procedencia de los bienes serán analizados en una audiencia preparatoria que el juzgado deberá de programar .

El caso

Cuando el proceso inició, la Fiscalía aseguró que había incautado únicamente 22 de 139 inmuebles valuados en $4 millones que habían sido adquiridos con fondos ilegales desde la banda narco, ligada a la Mara Salvatrucha,

Amaya Pineda (ahora muerto) y Candel Osorio fueron detenidos el 22 de febrero del año anterior luego de hacer un allanamiento en su vivienda, en la residencial Bosques de Santa Elena Sur, en Antiguo Cuscatlán, donde encontraron siete kilos de cocaína valorados en $197,449.

Según la acusación de la Fiscalía General de la República, Amaya era señalado de ser un jefe de una estructura de trasiego de drogas, desde Costa Rica y Panamá, hacia El Salvador y diferentes destinos.